2/11/08

FIELES DIFUNTOS

La fidelidad como virtud, ése es el camino. La fidelidad a Dios, sabiendo que caminamos siempre avanzando, aunque a veces caigamos en oscuridades, en noches profundas que nos hagan dudar. ¿Alguien nos está tentando?

Mi alma pide, recuerda al Señor, que su fidelidad y ternura son eternas. Suplica que su misericordia se acuerde de mí, que me mire con buenos ojos, y que tras mi arrepentimiento sincero, me perdone todos mis pecados, esos descuidos, esas faltas. Esos comentarios de más, ese pensar mal del otro, tantas y tantas cositas que sin darme cuenta me hacen tropezar.

Pero a pesar de todo esto, yo sé que al final te veré, veré a Dios, y serán mis propios ojos los que te verán, porque soy ciudadano del cielo, porque soy hijo de Dios, y Jesucristo transformará mi cuerpo, nuestro cuerpo terrenal, en un cuerpo de energía gloriosa.

Cuando la vida vaya acabándose aquí, en esta tierra de dolor, de infierno en muchas ocasiones, cuando la agonía llegue a su fin, cuando la piedra que arrastramos sea muy pesada y grande, en ese momento se rasgará el velo del cielo, y veremos bajar a miles de ángeles y familiares que vendrán a por nosotros porque habremos resucitado a la vida eterna, la verdadera vida, la que no se agota, en la que tendremos presencia de Dios en todo momento.
Será como cuando vas al sagrario, donde todo se diluye, donde todas tus inquietudes se llenan de paz, porque realmente el sagrario es una gran puerta al cielo, lo que ocurre es que tiene una cortina de hilo natural y encajes y no se ve con la claridad que veremos en ese día.

Recemos por nuestros santos-difuntos, no solamente estos días, sino todos.

En la oración nos unimos a toda la comunión de los santos, y recordemos de forma especial a estos santos mártires, esos casi quinientos que hace poco fueron nombrados públicamente. Pidamos también para que ellos intercedan por nosotros, por la Santa Madre Iglesia, por los sacerdotes y toda la vida consagrada, y no olvidemos nunca a nuestros seminaristas.

¡Que Dios nos bendiga y nos muestre su rostro!

4 comentarios:

  1. Anónimo2/11/08

    ¡Qué dis te vendiga,amigo!

    ResponderEliminar
  2. Anónimo2/11/08

    Estás conmigo?Por que yo sí!

    ResponderEliminar
  3. Anónimo2/11/08

    Te felicito por ser así de bueno,enseñando a todos lo que significa la oración.

    ResponderEliminar
  4. Anónimo2/11/08

    Felicidades por ser el día de tu santo!DON ANTONIO.

    ResponderEliminar